martes, 6 de enero de 2015

Convierte tus playeras viejas en cuadros para la pared


Tengo una maleta llena de ropa que ya no me queda pero no quiero tirar por cuestiones sentimentales. Ya sé, no es normal tener una relación con una playera pero estas dos por ejemplo fueron los primeros modelos que sacamos cuando salió el primer libro de Black Cat Bones Editions, mi antigua editorial.

Tengo el libro, pero ya ninguno de los prints, y sólo me quedaban estas dos playeras con dibujos del mismo autor.

El problema es que, como pueden ver en la foto, me quedan minúsculas, y no es de sorprenderse, me quedaban en 2005 :O

Llevo unos cuantos días decorando las paredes de mi depa. Con todo y que quizá en unas semanas tengo que mudarme me dio por mandar a enmarcar algunos pósters. También pinté de dorado el marco del espejo de mi cuarto con el spray que me sobró de los adornos navideños.

Así que lo más lógico era colgarlos también. El método fue muy fácil: simplemente los monté en aros de bordar suficientemente grandes. Estos los pinté también con el aerosol para que combinen con el espejo.

No es nada complicado pero aquí tienen el paso a paso.

Pésima mi foto, pero bueno, ahí hay dos playeras minis y dos aros para bordar en los que entre el dibujo. 


Pinta los aros con pintura en aerosol (opcional)


Plancha las playeras, así va a ser más fácil tensarlas en los aros.

Acomoda cada aro para que el dibujo quede por dentro, con el tornillo del aro hacia arriba porque de ahí lo vas a colgar.


Recorta los sobrantes de tela (no los tires, el algodón sirve muy bien de trapo). La cinta la usé para quitarles los pelos del gato, porque mientras pintaba los aros decidió que él iba a reutilizar mis playeras, pero de cama :S


Y ya, cuelga en la pared :3


lunes, 5 de enero de 2015

Cómo lavar tu chamarra de piel en la lavadora



Dicen que el amor no se puede comprar pero hace como cuatro años yo compré a mi mejor amiga: una chamarra de piel que combina con todo.

Esta prenda no puede faltar en ningún guardarropa. Pero tiene dos problemas: no debe lavarse, se supone, y por lo tanto termina oliendo mal y además se hace más grande con el uso.

Aparte, a mí no me gusta cómo se ven nuevas, el look "súbete a mi moto" cuando están muy brillantes como que no me agrada. Y las vintage, que compras en algún bazar, seguro seguro están sucias.

¿Qué hacer? Internet me dijo que sí la podía meter a la lavadora y que eso hace Meredith Melling Burke, exeditora de Vogue.

Leí la etiqueta. Piel de borrego, nunca lavar, nunca secar en secadora. ¿Quién es el fabricante de mi prenda para saber más que Meredith? Así que la metí a la lavadora.


Quedó im-pe-ca-ble, perfecta. Limpia, oliendo bien, con ese look vintage pero no maltratado, con las arruguitas en los puntos perfectos. Así que aquí les paso el dato de cómo hacerlo.


Como nota adicional, mientras más fina es una chamarra, mejor funciona este método, porque están hechas con piezas completas y no con tiras, y además el impermeablizado suele ser muy bueno. No funciona con piel sintética, claro.


1. Voltea la prenda y cierra todos los cierres


Asegúrate de que todos los bolsillos están vacíos, cierra los cierres si es que tiene, voltea y cierra bien.



2. Lava rápidamente

Elige el ciclo más corto de tu lavadora (el de la mía es de 10 minutos más 5 de centrifugado). Yo puse 2 cucharadas de jabón de Marsella rallado en la máquina, porque el detergente es muy agresivo. Además, agregué dos pantalones para que le hicieran un poco de colchón y no se golpeara mucho.

Obvio, en cuanto la vi dando vueltas me puse a llorar y a maldecir el momento en que le creí a Internet, pero ya no había vuelta atrás.


3. Seca


Dos opciones: si la secas en la secadora se va a encoger, que era lo que yo quería porque ya se había estirado con el uso. Seca 10 minutos, póntela, verifica las mangas y estíralas con cuidado si es necesario y seca 10 minutos más, así hasta que esté seca. No te saltes el paso de estirar las mangas cada 10 minutos o encogerán demasiado y te quedarán cortas.

Si no quieres encogerla entonces cuelga en un gancho de madera, ancho. No la pongas en el sol, puedes secarla en el baño, tardará varios días.



4. Suaviza

Ya seca, tu chamarra se siente un poco tiesa. Aquí usé un viejo truco para suavizar los zapatos de nieve: aceite de linaza. Aplica con un trapo limpio que estés seguro de que no destiña. Aplica hasta 3 capas, dejando que se sequen entre una y otra.

El aceite de linaza se consigue fácilmente en donde vendan material para pintura y óleos.



5. Lúcela

Quedó limpia, suave y hasta retomó la forma que había perdido con tantos años de ponérmela casi diario. La amo.